María Alejandra tuvo la opción de abortar, debido a que sufrió náuseas y graves vómitos durante su embarazado, razones que la legislación peruana admite para tomar esta drástica decisión. Pero, eligió la vida de su hija que en la actualidad tiene cuatro meses, hoy cuenta su historia con orgullo.
“Yo tuve la tercera causa según este artículo, y no fue un cuadro cualquiera, el mío fue agudo, desde la semana 8 hasta la 29 el gravol y el zofran me hacían cosquillas. Me tuvieron que tratar con haldol (medicamento psiquiátrico) para tratar de pararme el vómito desde el sistema nervioso central. Este medicamento tenía efectos piramidales. Cuerpo entumecido, no podía caminar, ni dormir, parecía un Tiranosaunio Rex de 120 años.
Pesaba 43 kilos teniendo 6 meses de embarazo. Me atoraba con mi saliva, me dieron ataques de pánico y desde ese momento aún tengo que lidiar con la ansiedad.
Fue un momento muy traumático y horroroso para mí, ya no me interesaba si me alimentaban por el cuello o por la nariz. Y por supuesto todos sufrían conmigo, desde mi esposo, nuestra familia, amigos hasta mi doctor que diariamente iba a verme.
La situación obviamente fue fea y muchas veces me pregunté el porqué a mí y sobre la pena que sentía de no poder estar enamorada de mi embarazo ni del bebé que tenía dentro, porque ese embarazo era el causante de mis males y que sólo acabaría cuando el embarazo terminara. Pero nunca pensé en abortar y gracias a Dios mi médico nunca me lo puso como opción.
Me apoye mucho en sus oraciones y mucha confianza en Dios. Nos costó muchas lágrimas y dolor, pero, finalmente todo paso y ahora tengo una hija hermosa de 4 meses a la cual amo.
Volvería a pasar por todo esto. Tal vez, aún me asusta pensar en ello, pero sí tendré más hijos pese a esta experiencia, y si alguien me dice que tengo que abortar porque mi vida peligra por otra hiperémesis, sin elegancia lo mandaré a freír monos en una sartén de palo!!! Dios nunca abandona. Y para terminar, si alguien conoce a alguien que quiera abortar por una hiperémesis gravídica, cuéntenle mi historia o mándenmela para conversar con ella.
NO AL ABORTO TERAPÉUTICO”.