• «No podemos tener la cultura del descarte: ¡Los enfermos no nacen, sí nacen los sanos!», expresó en su homilía en Yumbel.
FABIÁN ALVAREZ
A no ser «indiferentes» y a no caer en la «cultura del descarte» llamó ayer el arzobispo de Concepción, Fernando Chomali, quien en la misa por la festividad de San Sebastián, en Yumbel, instó a los miles de fieles que hasta allí llegaron a rechazar el aborto y a defender la vida. «En Chile estamos en un momento muy delicado, en Chile se quiere legislar a favor del aborto», expresó monseñor, quien preguntó a los peregrinos y, a la vez, se respondió: «¿Qué madre que está aquí presente no daría su vida por su hijo? Todas darían la vida por su hijo. ¿Qué madre que está aquí cambiaría un hijo enfermo por otro? Ninguna madre».
Expresó que «no podemos tener la cultura del descarte: ¡Los enfermos no nacen, sí nacen los sanos!, ¿por qué? Los creyentes no podemos ser indiferentes y tenemos que trabajar arduamente para que se respete la vida». Aseguró que esta defensa «la hacemos en nombre de la fe, por cierto, porque somos creyentes, pero también la hacemos en nombre de la razón. La razón nos dice que una sociedad justa cuida a sus ciudadanos desde el momento de la fecundación».
Acotó que «cada ser humano ha sido pensado por Dios desde siempre y no tenemos derecho a terminar con esa vida» y pidió no ser indiferentes frente al tema «porque habrá menos niños, habrá menos alegría, habrá menos esperanza».
Al hablar con la prensa, afirmó que es el primero en reconocer que «hay embarazos dramáticos, pero eso no se soluciona con una acto violento, como es terminar con la vida humana de un inocente. Y yo me siento en la obligación, como arzobispo de esta comunidad, de hacerlo ver y decirlo con todas sus letras». Agregó que «desde el punto de vista de la ciencia —nosotros tenemos la mejor universidad en Chile, tenemos grandes científicos— y la vida comienza desde la fecundación».
Esta festividad es una de las celebraciones más antiguas y masivas del sur del país, y espera congregar a 500 mil fieles hasta este fin de semana. Ayer, en el día oficial del festejo católico, unos 400 mil peregrinos llegaron al pueblo y soportaron más de 30 °C de temperatura. Hasta Yumbel llegó el general director de Carabineros, Bruno Villalobos, para fiscalizar los servicios especiales de seguridad y tránsito. Además, se realizaron unos 800 controles, para evitar servicios «pirata».
Fuente: El Mercurio 21 de enero del 2016